Mestre recuerda que “el 80% de las competencias que tienen las administraciones públicas con La Línea, no se cumplen como correspondería, y fruto de ello es el resultado de esta reunión. Cuando no hay respuestas en asuntos fundamentales como el empleo, la educación, sanidad, turismo, comercio, o las infraestructuras, cuando existe falta de interés en trabajar en lo que es la responsabilidad de uno, además de denotar incapacidad para llevarlo a cabo, pasa esto”.

Así, la parlamentaria andaluza vuelve a insistir en que “es necesario aplicar la lealtad institucional entre administraciones para dar una solución a los problemas de La Línea, y para ello, la Junta tiene que subirse al tren de la propuesta hecha por el delegado del Gobierno de España en Andalucía, Antonio Sanz, de crear un Comisionado de Zona Especial para la ciudad en la que estén, además, la Diputación Provincial de Cádiz, la Mancomunidad de Municipios del Campo de Gibraltar y el Ayuntamiento”.

Mestre afirma que “todos los indicadores socioeconómicos de La Línea reflejan la necesidad de que esta población reciba un tratamiento especial por parte de todas las administraciones, tanto por niveles educativos, de empleo o de seguridad por los altos índices de contrabando y que tienen como principal origen la cercanía a Gibraltar”.

Para la parlamentaria andaluza, la Junta tiene que afrontar el problema del absentismo escolar en la educación secundaria que sufre La Línea de la Concepción, que en 2015 fue del 3,17% y que en 2016 se incrementó hasta el 4%.

Mestre recuerda que “para que no haya delincuencia, hay que formar a la población, trabajar para acabar con el abandono escolar, generando oportunidades y progreso en zonas como La Línea, y eso es responsabilidad de su gobierno socialista en Andalucía”. 

“A todos los problemas sociales”, continúa Mestre, “se le añaden los problemas financieros del Ayuntamiento y la realidad de que La Línea tiene los impuestos más altos de toda la provincia de Cádiz. Una alta presión fiscal que lastra el desarrollo del municipio”.

También se ha referido a la "falta de industrialización, falta de inversiones empresariales, disminución progresiva de la recaudación en los últimos años, pocas posibilidades de desarrollo urbanístico y la necesaria prestación de servicios a un porcentaje importante de población flotante sin ingresos para las arcas municipales", añade.

Por todo ello, Mestre considera evidente que “éste es un municipio especialmente vulnerable desde el punto de vista social y económico y, por tanto, necesita de la ayuda y la apuesta clara de todas las administraciones para, de forma coordinada, establecer una planificación estratégica para el desarrollo e impulso de la sociedad linense y que mejoren progresivamente los índices de calidad de vida”.