Veamos, nos engañan una y otra vez, y volvemos, si me engañan una vez la culpa es de los demás. Pero si nos engañan dos o más veces la culpa es solo nuestra. 

Por esto debemos de prepararnos porque este tipo de gente como ya hemos visto, y estamos viendo, se encuentra en todas partes, y lo peor se encuentran en el gobierno. 

Utilizan estrategias para manipularnos para convertir nuestras vidas en una pesadilla. 

Ahora nos cobran por tener un accidente con el coche, o al menos eso pretenden, pagar una indemnización al gobierno del 20% por una minusvalía. Pagar por circular por las autovías, subida de cuotas de autónomos, las atenciones primarias no funcionan por falta de personar, por malas gestiones, los agricultores en la ruina, no se puede comer carne porque según el ministro de consumo es de mala calidad. Y así todo lo demás, pero nos engañan, y volvemos a votar lo mismo. 

Estamos en manos, de gente sin escrúpulos, manipuladores, antisociales, orgullosos, mentirosos, caprichosos, gente incapaz de detener el sufrimiento humano, de sentir pena o arrepentimientos, pero nosotros continuamos pasivos como borregos y nos llevan a donde ellos quieren llevarnos sin que nadie se queje, lo estamos comprobando con el virus, y la forma de gobierno, hoy dicen una cosa, y mañana otra distinta, nos arruinan y aplaudimos. Nos globalizan, con la agenda 2030, 2050, y nos quitan la libertad, y el final accedemos ha una esclavitud, sin látigo, pero de cuello blanco en pleno siglo XXI. Nuestra pasividad nos quitará la libertad obtenida con mucho sufrimiento. 

Todo esto es de suma importancia para que lo tengamos en cuenta, pues resaltar que estos personajes no son antisociales, sino que se caracterizan por su capacidad de adaptarse y alterar su forma rápidamente, como si no pasara nada, en comparación se comportan como el camaleón por su gran capacidad de cambiar de aspecto adaptándose, al que le resulte más ventajoso. Así es, y como la población no rectifique manifestándose y a la hora de elegir, entre unos y otros, lo llevamos crudo. (Es una opinión). Sobre lo que está a la vista. Y,  lo que está a la vista no necesita gafas. Solo sentido común. 

(Leonardo da Vinci) Dice; el hombre es victima, de una demencia que le hace sufrir siempre, con la esperanza de no sufrir más. Y así la vida se le escapa, sin gozar de lo ya adquirido. Y no le faltaba razón.