Los hechos ocurrieron cuando el menor se aisló del grupo de amigos con los que había quedado, lo que provocó que se desorientara y no lograra ubicarse, permaneciendo perdido durante varias horas.

Al encontrarse en un lugar con escasa cobertura, no podía hacer uso del teléfono móvil, con normalidad, hasta que, tras numerosos intentos, logró contactar brevemente con la Jefatura de la Policía Local.

Los miembros del GOAP trasladaron inmediatamente la información a la Guardia Civil, para ampliar los efectivos de búsqueda ante la urgencia de la intervención. Ambos cuerpos de seguridad establecieron un dispositivo conjunto y coordinado para su localización.

Ante lo abrupto del terreno, y tratándose como se trataba de un paraje de difícil acceso, los agentes tuvieron que desplazarse a pie durante una hora aproximadamente hasta que consiguieron dar con el joven, que se encontraba en una vaguada con abundante arboleda y presentaba claros síntomas de deshidratación y agotamiento debido a las altas temperaturas sufridas y la falta de agua.

Policía Local y Guardia Civil pudieron atenderle debidamente y le facilitaron agua y alimento, trasladándolo luego a un lugar seguro para entregarlo a su familia.