Con el aforo prácticamente completo, se calcula que han acudido entre cinco mil y seis mil personas, aproximadamente, a cada uno de ellos.

El alcalde de La Línea, Juan Franco, destaca la repercusión que para la ciudad tiene esta masiva afluencia de público, ya que se traduce en un retorno para la economía local debido al aumento del consumo en hostelería, realización de compras y ocupación de plazas hoteleras. “El sábado hemos tenido una ocupación hotelera, prácticamente, a tope.

La hostelería, creo que también ha tenido un fin de semana grande, las playas han estado repletas de gente, el buen ambiente ha reinado y no ha habido absolutamente ningún incidente”, manifestó el alcalde, quien también sumó la celebración del Sábado de farolillos en la dinamización de la actividad comercial.

Franco se muestra satisfecho al comprobar que este tipo de iniciativas tienen un retorno directo en la economía del día a día e incentivan que La Línea de la Concepción crezca y progresivamente mejore su imagen.