Según la RAE, el Ayuntamiento es la corporación compuesta por el alcalde y varios concejales para la administración de los intereses de un municipio, en este caso Los Barrios. Un interés que debe estar por encima de siglas políticas, venganzas personales u otras cuestiones que solo sirven para perjudicar a los 24.000 vecinos y vecinas que son los que pagan los platos rotos de dichas acciones.

Sin embargo, en estas semanas estamos viendo como el Tribunal Supremo está dinamitando los cimientos de la famosa “hoja de ruta” andalucista, con la nulidad de las amortizaciones de plazas de 2012, lo que conlleva la readmisión de dichos trabajadores y el pago de todos los salarios desde 2012 hasta su readmisión.

En Enero de 2014, Jorge Romero junto a todos los concejales andalucistas y los del PP, dieron una rueda de prensa afirmando que los fallos del TSJA les daban legitimidad para seguir trabajando. Lo justo sería pensar que al igual que afirmaba que los fallos de TSJA les daba legitimidad, los fallos del TS les arrebata dicha legitimidad, siendo el señor Romero esclavo de sus propias palabras.

Nuevamente, como en 2012, volvemos a encontrarnos con viejos conocidos, una futura nómina difícil de pagar, unos presupuestos de 2018 irreales, una RPT inservible.. A los que hay que sumar las indemnizaciones millonarias, los ingentes costes judiciales, la privatización de servicios, las subidas brutales de impuestos o el deficit en la mayoría de servicios municipales. Una situación que solo tiene como solución la construcción de una marea progresista en nuestro pueblo que saque del poder a los que nos han llevado a esta situación y nos permita poner fin a la huida hacia adelante de los andalucistas que nos ha llevado de vuelta a la casilla de salida.